Una empresa de Reus crea un motor eléctrico para barcos alimentado por el sol y el viento
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El ingenio se ha desarrollado para veleros de tamaño medio y cuesta entre 9.000 y 12.000 euros
- Placa solar instalada en un barco ecológico, fondeado hoy en el puerto de Tarragona. Foto: CRISTINA FORNÓS
RAFAEL MORALES
TARRAGONA
La suciedad que vierten a los mares y el ruido que provocan los motores diesel que equipan los veleros de tamaño medio y las embarcaciones de ocio pueden tener los días contados. Una empresa de Reus se ha convertido en la primera de España que desarrolla y legaliza un sistema de propulsión totalmente eléctrico para embarcaciones, alimentado por las energías del sol y del viento.
“Me gusta este proyecto porque engloba prácticamente todos nuestros objetivos, especialmente el de la eficiencia energética”, ha confesado hoy Encarna Baras, directora del Instituto Catalán de Energía, en la presentación del nuevo sistema de propulsión en el puerto deportivo de Tarragona.
Placas solares y aerogenerador
El sistema desarrollado por Innovanautic, un empresa integrada por profesionales con experiencia en energías renovables, incorpora placas solares y un pequeño aerogenerador que van alimentando las baterías del motor eléctrico. “Garantiza la máxima eficiencia de todas las fuentes de energía y las adapta al mejor régimen de funcionamiento”, ha asegurado Xavier Prats, ingeniero y socio de la empresa.
La firma ha desarrollado este motor para veleros de tamaño medio, pero también está estudiando la posibilidad de aplicar el mismo sistema en barcos de pesca y de pasajeros.
El motor de Innovanautic proporciona una potencia de 7,5 kilovatios, que es equivalente y proporciona las mismas prestaciones que las embarcaciones equipadas con motores diesel de 30 CV. El coste de la aplicación básica está entre 9.000 y 12.000 euros. Se puede instalar en embarcaciones nuevas, pero también permite adaptarlo en las que ya están equipadas con motores diesel.
Sin ruido, sin olor a gasóleo, sin manchas en el agua, el velero de Innovanautic ha maniobrado en el puerto deportivo de Tarragona como por arte de magia porque tiene las velas plegadas y pone rumbo hacia alta mar. La autonomía tampoco es un problema, según Prats. “Es difícil de cuantificar porque las placas solares y el aerogenerador van suministrando energía extra al motor”, ha añadido.
Fuente: www.elperiodico.com
